Florencia Raggi y su relación con los autos: "A uno todavía lo extraño como si me hubiera separado de una pareja"

Cada conductor tiene un vínculo diferente con el auto. Hay algunos que solo lo toman como un objeto que los lleva de un punto A a un punto B. Pero hay otros que establecen un vínculo con el vehículo. A ese segundo grupo pertenece la actriz Florencia Raggi.

"No es solamente una máquina. Es algo que nos reúne con otra gente y que te trae recuerdos", le dijo a Clarín la también modelo durante la presentación del nuevo Renault Koleos en el país.

Raggi fue invitada a participar del evento de lanzamiento y tuvo un rato para charlar sobre su relación con los autos: "Siento que son parte de mí. He tenido diferentes autos y han sido muy especial. A algunos quise más, otros quizá menos. El auto es alguien con el que me vinculo, no es una cosa".

La actriz contó que aprendió a manejar cuando pudo sacar la licencia de conducir, a los 18 años: "Yo era muy, muy cabrona, y terminé yendo una autoescuela porque me peleaba con todo aquel que me enseñaba", contó.

Apenas tuvo el permiso para conducir, se compró su primer auto "con ahorros que ya tenía; yo ya venía trabajando desde hace tiempo y tenía una plata ahorrada".

A Raggi se la ve orgullosa del primer auto que eligió comprarse. "Me compré un Daihatsu Cuore. Algunos me decía que era un (Hyundai) Tico y yo me enojaba y les remarcaba: ¡Es un Cuore! Era como una abanderada del Cuore. Había estado mucho eligiéndolo y para mi era muy especial porque me lo había comprado con mi sueldo. Era muy importante".

-¿Qué es lo que más valorás hoy de los autos modernos?

-Me gusta mucho la tecnología y que sea seguro. Y me interesa también el perfil del auto, que me parece que cuenta mucho también el auto que uno elige.

-Sí, pero como te dije me gusta que sea un auto que seguro. Que pueda ir fuerte dentro de lo que se puede pero que sepa que el auto va a responder.

-Varias. ¡Jajaja! Prefiero no recordarlos.

-¿Cuál fue el auto que más te gustó manejar en tu vida?

-Mi auto preferido, que lo extraño todavía como si me hubiera separado de una pareja, es un Volvo que tuve muchísimos años. Todos me decían tenés que venderlo, tenés que venderlo, porque ya era muy viejo y yo no lo quería vender. En ese auto me sentía segura, era cómodo, me gustaba su perfil y era súper innovador. No lo tendría que haber vendido.

-¿Qué te gusta de los autos modernos?

-Bueno este Koleos que están presentando me hace acordar un poco a ese favorito mío. Por fuera me parece muy lindo y es familiar también. Y toda la innovación y la tecnología que tiene me parece genial. Cuando me senté y vi todas las pantallas que trae dije ¡Guau! Todo lo referido a la seguridad también y la posibilidad de ir viendo lo que pasa alrededor del vehículo me parece súper innovador y moderno.

-¿Está permitido comer dentro de tu auto?

-Sí, se puede comer. Depende de qué y tratá de no hacer mucha miga. Pero se puede.

-¿Qué no puede faltar en el auto de Florencia Raggi?

-Agua, manteca de cacao y una cremita para las manos